miércoles, 15 de mayo de 2013

empezamos con las bicis para los becados

Varias buenas nuevas en nuestro primer viaje del año a los montes santiagueños. Con gran alegría podemos informar que ha concluido la primera etapa del proyecto “aljibes” en Majada Sud, donde 6 familias de teleras tendrán agua potable en sus nuevos aljibes, aunque habrá que esperar que llueva. Llevan 6 meses sin lluvias y los camiones cisterna de la municipalidad no llegan al interior del monte por la pésima condición de los caminos. El calor y la sequía ya están causando muertes de animales. Repartimos la lana que nos donan tan generosamente año tras año y nos envían desde Cholila, Río Negro. Alberto, chofer en la parroquia de Forres y nuestro colaborador en cada viaje, había pesado, separado y embolsado la lana que entregamos luego a cada una de las teleras para que comiencen con el lavado, el hilado y sus trabajos en telar. También entregamos 6 bicicletas a alumnos becados de la Escuela de Barrancas Coloradas, algunos de los cuales debían caminar muchos kilómetros diariamente para asistir a la escuela. Todo el 9° grado está becado, y del 1° año del polimodal solo faltan 2 alumnos porque no aprobaron todas las materias el año pasado, que es un requisito de nuestro reglamento para el otorgamiento de becas Conocimos a la Directora de Secundaria, quien nos mostró el nuevo edificio. El mismo que se inauguró el año pasado y al poco tiempo se quedó sin techo por un tornado. Desde agosto los chicos estaban concurriendo a clase a la iglesia de Barrancas Coloradas. La nueva escuela tiene orientación en la producción de bienes y servicios, con muy buenos profesores que no tienen recursos para aplicar lo que enseñan. No hay luz ni agua. Hay cinco computadoras sin usar, y un proyecto de huerta..... La buena noticia es que hicieron un estudio de suelos allí cerca, en Agua Linda, y hay probabilidades de realizar una perforación para extraer agua potable. Nos enviarán los estudios por internet (cuando vayan a la ciudad). Desde noviembre hasta ahora nacieron 5 bebes hijos de nuestras teleras, y a pesar del calor sofocante en el día de nuestra visita y el largo camino que debían recorrer, estaban presentes con sus hijos en las reuniones de compra de tejidos. Hicimos nuestra primera experiencia de una feria de tejidos con el objetivo de que se vayan acostumbrando a vender por si solas. En el verano habíamos enviado a dos compradoras que querían exportar y compraron a nuestras tejedoras 15 alfombras, lo que nos pone muy contentas ya que nuestra intención es que se vayan independizando en la comercialización de sus productos. Otra vez debemos decir que nuestras teleras siguen mejorando la calidad de sus prendas; en este viaje compramos muy lindas cosas de lana y de algodón